►Ante la piel rosácea,
¿qué hacer?
Si tu rostro muestra piel enrojecida, sientes tirantez o picores, y aparecen unas pequeñas pústulas que puedes confundir con acné, quizá padeces de piel rosácea. La rosácea afecta a muchas personas, sin embargo, es aún muy desconocida y, en muchas ocasiones, se confunde con brotes de acné. En este artículo te contamos qué es y qué puedes hacer si tienes la piel rosácea.
¿Qué es la rosácea?
La rosácea es una enfermedad crónica que afecta a la piel del rostro, sobre todo en la zona de la frente, las mejillas, la nariz y la barbilla; pudiendo llegar a afectar incluso a los ojos.
Esta afección cutánea es tres veces más frecuente en mujeres que en hombres y suele afectar a adultos de mediana edad. En mujeres, es más frecuente que aparezca en la etapa de la menopausia.
La rosácea se caracteriza por la inflamación de la piel, acompañada de granitos y pústulas. Esta inflamación desestabiliza la función de la piel, deshidratando las zonas en las que se encuentre.
Aunque parece contradictorio, en ocasiones la piel grasa también puede deshidratarse y mostrar signos de sensibilidad. Las pieles rosáceas son grasas por producir sebo en exceso y están deshidratadas por la alteración de la barrera protectora de la piel. Al faltarle dicha hidratación la sensación de tirantez y sequedad resulta molesta, por eso son pieles sensibles y hay que tratarlas como tal.
Los casos de rosácea pueden ir acompañados de otras afecciones cutáneas como el acné, ya que tanto la rosácea como el ancé son partes de un problema en las glándulas sebáceas. Sin embargo, no debemos confundir una enfermedad con la otra. El acné tiene más carácter hormonal en origen, mientras que la rosácea no tiene nada que ver con cuestiones hormonales.
Causas de la piel rosácea
Esta afección de la piel a menudo se presenta por brotes, causados por distintas situaciones, estas son solo algunas de las causas que pueden dar lugar a la piel rosácea:
- Los baños calientes y saunas, son situaciones que si sufres de rosáceas deberías evitar.
- El sol directo en la cara. Usa protección solar específica para este tipo de enfermedad.
- La contaminación. Está comprobado que a las personas que viven en grandes ciudades tienen más propensión a sufrir rosácea. La contaminación debilita la piel y empeora la vascularización.
- Los cambios de temperatura, del calor al frío, del frío al calor, o incluso el viento son factores que afectan directamente a la piel y especialmente cuando se sufre de rosácea.
- Una mala alimentación, las comidas copiosas o un exceso de azúcar pueden acentuar los brotes de rosáceas.
- El alcohol, el café y el té son estimulantes que pueden provocar la dilatación vascular, proyectando la rosácea.
Todos estos factores afectan a tu piel, favoreciendo la aparición de rosácea. Conociéndolos puedes prevenir la aparición de rosácea en tu rostro.
¿Cómo tratar la piel rosácea?
La rosácea, como hemos comentado anteriormente, es una enfermedad que aparece por brotes y una vez que aparece se vuelve crónica. No tiene cura como tal, pero se pueden espaciar los brotes en el tiempo con unos hábitos y cuidados adecuados.
Encontrar un tratamiento adecuado para las pieles con rosácea no siempre es tarea fácil, ya que la piel se vuelve sensible y necesita de unos cuidados especiales. La medida más efectiva para tratar la rosácea es la que se centra en aplicar los brotes y frenar su evolución.
Por un lado, habrá que evitar las causas que hemos mencionado anteriormente, y por el otro, encontrar una rutina facial que se adapte adecuadamente a las necesidades de tu piel.
La rosácea es una alteración de la piel que la convierte en extremadamente frágil. La visibilidad de los vasos sanguíneos a través de la piel es causante de una perdida de la elasticidad, por eso una de las recomendaciones es usar un producto que potencie la creación de colágeno, para ayudar a reducir la inflamación y la dilatación.
Uno de los ingredientes más eficaces para ello es el retinol. Usado en pequeñas dosis, está comprobado que puede ayudar a mejorar la piel.
Puedes tener una rutina de piel facial específica para pieles sensibles, sin olvidar la limpieza y la hidratación, dos de los pasos más importante para mantener la rosácea a raya. Y por las noches, utilizar un producto que contenga el activo de retinol.
Por supuesto, si el brote de rosácea es lo bastante grave, lo ideal siempre es acudir a un especialista.
En Cosméceutica Tarrazo tenemos un producto que puede ayudar en casos de rosácea, el booster antienvejecimiento de Retinol. Este producto es un concentrado oleoso formulado con retinol al 1%, la dosis más elevada que permite un cosmético, para mejorar la elasticidad y estimula la producción de colágeno natural.
Los ingredientes del booster de retinol provienen de cultivo ecológico certificado y ha sido elaborado de manera muy cuidada para asegurar su efectividad sobre la piel.
Beneficios de usar retinol para tratar la rosácea
Los beneficios de usar el booster de retinol con una concentración del 1% en tu rutina facial cuando se sufre rosácea son numerosos, a continuación te contamos algunos de ellos:
- Favorece la renovación celular y la eliminación de las células muertas.
- Ayuda a mantener los poros desobstruidos.
- Afina la capa de la piel creada por los granos y las póstulas, favoreciendo la absorción del tratamiento que se esté siguiendo para la rosácea.
- Aporta un aspecto más luminoso y sano de la piel.
- Homogeneiza el tono de la piel, evitando la hiperpigmentación de algunas zonas debido a la rosácea.
- Combate la deshidratación de la piel, ayuda a restaurar el equilibrio de la piel.
Se puede luchar contra la rosácea con el principio activo del retinol, además de que éste aporta grandes beneficios a la piel. Si aún no estaba incluido en tu rutina facial, no dudes en incluir este maravilloso producto.